La ley determina que el 27 de diciembre se tendrá que constituir el el Parlamento, día en que los nuevos diputados tomarán posesión de su acta. Los diferentes grupos comenzarán a desplegar sus estrategias para formar coaliciones y alianzas que les permita tener un candidato a presidir la Junta.
Para ello en una primera votación en el Parlamento deberá obtener al menos 55 votos favorables y lograr la mayoría absoluta.
Una vez que se realice la primera sesión de investidura comenzará a correr un calendario de dos meses, que coinciden con dos meses, diciembre y enero, con numerosos días festivos, aunque si no se logra una mayoría absoluta en primera votación, en las sucesivas 48 horas se celebrará otra para la que solo se necesitará la mayoría simple.
Si en el plazo de dos meses no se ha podido elegir un presidente, el Parlamento se disolverá, convocándose a nuevas elecciones para justo 54 días después de dicha disolución.
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Se prevé que la primera sesión de investidura se celebra a mediados de enero, mientras que la nueva convocatoria de elecciones, en caso de que no haya acuerdo se realizará en marzo. De esta manera, las elecciones tendrían que repetirse el 26 de mayo, coincidiendo con los comicios municipales y europeos, porque en ningún territorio se pueden celebrar dos elecciones sin mediar al mes un plazo de dos meses entre ambas.
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