El artefacto, que había sido colocado frente al portal, estalló a las 2:00 hora local (0:00 GMT) y causó daños en la entrada del edificio y la rotura de los cristales de las ventanas.
En el momento de la explosión se encontraban en la casa el fiscal y su esposa, cuya residencia se encuentra en el centro histórico de Reggio Calabria.
Para los investigadores se trata del último episodio de intimidación de la 'Ndrangheta contra la magistratura de la región calabresa, que combate desde hace años la considerada más potente organización criminal del país.
El pasado 25 de enero, el fiscal adjunto de Reggio Calabria, Giuseppe Lombardo, recibió una carta con una bala y una nota "de contenido amenazador", que llegaba pocos días después de que estallase una bomba ante el Tribunal de Reggio Calabria.