El pulso entre el Gobierno y el juez Yusty por la exhumación de Franco

  • El juez Yusty tiene suspendida la licencia de obras para mover la losa que cubre la tumba

  • El Gobierno insiste en que lo sacará, porque no necesita licencia de obras ni el permiso del juez

Cuando el Supremo ya había dado su beneplácito para la exhumación de Franco, cuando todo parecía hecho, las miradas se volvieron hacia el juez Yusty, titular del Juzgado de lo Contencioso Administrativo nº 3 de Madrid, que desde febrero tiene suspendida la licencia de obras y que no tiene intención de desbloquearla antes de finales de octubre, como mínimo. Según fuentes jurídicas "sin licencia, la lápida no se mueve".

Pero al Gobierno, el juez Yusty no le preocupa. En cuanto el Tribunal Supremo emita su sentencia, todo se pondrá en marcha para sacar el cuerpo del Valle y trasladarlo al cementerio de Mingorrubio. "No vamos a esperar a la decisión del juez Yusty", dicen fuentes del Gobierno. Más aún, añaden, “Ya le gustaría al juez que la exhumación dependiera de él”.

La contundencia de las partes

Tanto las fuentes gubernamentales, como las jurídicas hablan con absoluta seguridad.

Perspectiva jurídica

  • Sin licencia de obras no se mueve la losa, diga lo que diga el Gobierno. Es lo que repiten una y otra vez fuentes jurídicas madrileñas.
  • El juez no va a levantar la suspensión sin oír las alegaciones de abogacía del Estado y del particular que solicitó bloquear la licencia. "Es una cuestión legal," ha confirmado el propio José Yusty a NIUS.
  • Las alegaciones se presentarán a finales de octubre y después habrá que tomar una decisión que puede ser en un sentido o en otro. Si Yusty decide mantenerla suspendida, el asunto podría acabar en el Tribunal Superior de Madrid o incluso otra vez en el Supremo.
  • La licencia de obras no tiene nada que ver con el procedimiento del Supremo. Es un trámite administrativo y por eso está en el juzgado de lo Contencioso Administrativo.

Perspectiva Gubernamental

  • La exhumación no necesita licencia de obras porque, según su versión, no es necesaria para abrir una tumba.
  • En todo caso, el Gobierno no necesita licencia, dicen desde dentro, porque la administración no tiene porqué pedirla.
  • El juez no es competente porque no puede ir en contra de una decisión del Consejo de Ministros que es el que ordenará la apertura de la fosa.
  • Los informes de la Comunidad de Madrid y de San Lorenzo del Escorial están tramitados y no se pueden parar.

La sentencia del Supremo, que se conocerá íntegramente en unos días, puede ser el árbitro que medie entre las partes. No va a ordenar nada al juez, no va a decirle lo que tiene que hacer pero sí va a señalar el camino. El Gobierno confía en que esos argumentos hagan mover ficha a Yusty. Está por ver si él decide interiorizarlos.

Si todo va como calcula el ejecutivo, la exhumación será rápida, tendrá toda la cobertura legal y se hará de forma discreta.

Si todo va como se plantea en el juzgado, el traslado tendrá que esperar a que esté acreditado que abrir la cripta no supone un riesgo de derrumbe de la basílica, como alegan los informes arquitectónicos planteados por el entorno de los Franco.

Ninguna de las dos partes parece dispuesta a ceder, ni da por buena la versión de la otra. Exhumado o no, eso sí parece claro, el culebrón Franco ya ha entrado en precampaña.