8 aceites esenciales para el cuidado de la piel madura
Con el paso del tiempo la renovación de las células que componen la piel es más lenta
Una buena hidratación se convierte en esencial cuando se llega a cierta edad
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MadridConforme pasa el tiempo vamos ganando experiencia, por ejemplo, es habitual aprender a distinguir qué batallas merece la pena luchar y qué problemas en el fondo son irrelevantes y no deberían convertirse en preocupación. Somos muy conscientes del paso del tiempo en muchas cosas, pero esto no tiene por qué reflejarlo nuestra piel.
Las pieles maduras requieren más cuidados que las jóvenes, o por lo menos unos cuidados más concretos, porque con el paso del tiempo la renovación de las células que la componen es más lenta, la piel es más fina, se deshidrata más rápidamente y aparecen antes los signos de envejecimiento. Aprender a cuidarla se convierte en algo esencial para quienes quieran volver a lucir una piel radiante y, sobre todo, sana.
Entre las muchas cosas que podemos hacer para cuidarla una buena hidratación es la primera de ellas, esto requiere buenos productos hidratantes, pero también es importante tomar una cantidad de líquidos adecuada, ya sea bebiendo agua, infusiones o tomando caldos.
Es importante alimentarnos de manera adecuada, con una dieta rica en frutas y verduras, también evitar el alcohol y el tabaco, y, sobre todo, usar protector solar tanto en verano como en invierno. Además, en nuestras rutinas de skincare podemos incluir productos que nos ayuden a recuperar la vitalidad de antaño, como sucede con algunos aceites esenciales, ideales para evitar el envejecimiento prematuro de la piel.
Aceites esenciales para el cuidado de la piel madura
En aquellas pieles en las que ya se va notando el paso del tiempo, donde aparecen pequeñas arrugas y líneas de expresión, es buena idea emplear aceites esenciales que aporten un efecto regenerador, antioxidante, reafirmante, cicatrizante y astringente. Los aceites esenciales son compuestos que se obtienen de la raíz, corteza, tallo u hojas de las plantas, son aromáticos, volátiles, no grasos y poco densos, y suelen usarse en cosmética por sus beneficios para la salud, también se emplean en aromaterapia.
- Aceite esencial de mirra. Está especialmente indicado para las pieles maduras, porque las revitaliza, además tiene efecto antioxidante, antiinflamatorio y cicatrizante.
- Aceite esencial de palmarrosa. Es excelente para la hidratación de la piel.
- Aceite esencial de lavanda. Este aceite no solo ayuda a regenerar la piel y promueve su cicatrización, también la calma.
- Aceite esencial de sándalo. No es fácil de encontrar, pero es revitalizante, regenerador y antiarrugas.
- Aceite esencial de Ylang Ylang. Es antiinflamatorio, calma las pieles irritadas y ayuda a reducir las manchas.
- Aceite esencial de incienso. Aporta elasticidad y es hidratante.
- Aceite esencial de romero. Estimula la circulación sanguínea, lo que aporta vitalidad a la piel.
- Aceite esencial de geranio. Se suele escoger cuando se busca reafirmar la piel y combatir la flacidez.
Antes de aplicar un aceite esencial es de vital importancia diluirlo en un aceite portador como el aceite de argán, jojoba o almendras, de este modo evitamos irritaciones; lo habitual es diluir unas 12 gotas de aceite esencial por cada 30 ml de aceite portador. También se recomienda probarlo en una zona pequeña antes de aplicarlo en el resto de la piel.