Es clave encontrando el ejercicio que más nos atraiga para que nos resulte más placentero entrenar
En el yoga hay muchas posturas y cada una de ellas se centra en conseguir unos beneficios determinados
El yoga, una práctica milenaria: beneficios, cuántos tipos existen y curiosidades que te sorprenderán
MadridEl descanso es importante, pero no siempre es fácil relajarse y conciliar el sueño. Todo lo que podamos poner de nuestra parte para lograrlo es una ayuda a la hora de conseguirlo y el ejercicio físico es una de las mejores formas de despejar la cabeza, reducir el nivel de estrés y encontrarnos mejor, tanto física como emocionalmente.
Aunque no siempre queramos verlo, porque hacer ejercicio requiere tiempo y esfuerzo, esta es una manera de sentirse mejor y cuidarse que siempre debería estar presente, en todas las etapas de la vida. De pequeños parece algo natural, pero conforma pasa el tiempo hay que descubrir la mejor manera de crear hábito, encontrando el ejercicio que más nos atraiga para que nos resulte más placentero entrenar.
Para muchas personas ese ejercicio es el yoga, una forma de mantener mente y cuerpo alineados, que requiere más esfuerzo del que parece a simple vista y que permite sentirse mejor, más ligero, más flexible y más saludable. En el yoga hay muchas posturas y cada una de ellas se centra en conseguir unos beneficios determinados, por ejemplo, si queremos dormir mejor y reducir el estrés podemos probar con la postura del zapatero o Baddha Konasana, como se dice en sánscrito.
La postura de yoga que ayuda a dormir y reduce el estrés
Son varias las posturas de yoga que pueden ayudarnos a dormir y reducir el estrés, de hecho toda la práctica contribuirá a eso si lo hacemos bien, pero hay algunas posturas o asanas que no son nada sencillas de conseguir, solo destinadas a quienes ya llevan tiempo practicando. La del zapatero, por el contrario, es ideal para principiantes, una forma de obtener resultados desde el principio de la práctica.
Esta postura no es complicada, pero como todas, requiere un poco de práctica para hacerla bien y cuanto más se haga, mejor saldrá. Para hacerla hay que sentarse en el suelo, con las piernas flexionadas y las palmas de los pies juntas, dejando que las rodillas caigan por su peso; después hay que acercar los talones a la pelvis, sin levantar las piernas. Si se puede, se sujetan los pies con las manos.
Gracias a esta postura, que parece sencilla, pero requiere cierta técnica, se puede estirar, fortalecer y alargar el cuerpo, también se consigue una apertura de pecho, lo que aumenta la capacidad pulmonar, también ayuda a aumentar la flexibilidad, mejorar el rango de movimiento del suelo pélvico y las caderas. Mejora la postura corporal, activa el sistema nervioso parasimpático y ayuda en la relajación. La del zapatero es una postura meditativa y, a través de una respiración consciente, puede mejorar la atención y la concentración.
Gracias a esta postura se eliminan tensiones y bloqueos de algunas partes del cuerpo, lo que ayuda a relajarnos tanto en el plano físico como a nivel espiritual. Una manera de reducir los niveles de estrés, calmando la mente y favoreciendo la relajación más amplia, lo que nos ayudará también a dormir mejor. El yoga es una disciplina que cada vez capta más adeptos, porque sus ventajas para ayudarnos a vivir mejor son muchas.


