Los mayores de 50 ya no se acuerdan del 'Póntelo, pónselo'

Hace 35 años una campaña de salud se propuso normalizar el uso del preservativo y marcó a toda una generación
'Póntelo, pónselo': así se gestó la campaña que lo cambió todo y así podría ayudar hoy a los jóvenes
Hace 35 años una campaña de salud pública sacó al preservativo del armario. El eslogan 'Póntelo, pónselo' fue un paso valiente e inédito para promover el uso del condón entre los jóvenes españoles en plena crisis del sida y revolucionar la forma en la que se hablaba de sexo en una sociedad que todavía arrastraba viejos tabúes del pasado. Sin embargo, aquellos jóvenes de los años 90 parecen haberse olvidado en su madurez de aquellas dos sencillas palabras, a tenor del preocupante incremento de casos de infecciones de transmisión sexual (ITS) entre el colectivo silver: casi ocho de cada diez mayores de 60 años reconocen no emplear casi nunca el preservativo.

Hablemos de sexo
La recordada campaña del 'Póntelo, pónselo' marcó un antes y un después en la educación sexual de aquella España de principios de los 90. Hablamos de una época en el que muchas farmacias aún se negaban a vender preservativos a los menores, a pesar de que nos habíamos convertido en el segundo país europeo, detrás de Portugal, en incidencia anual del sida. Había que cambiar las cosas. Promover la protección como una responsabilidad compartida alejándose del tono moralista o clínico de campañas anteriores. Se trataba de normalizar el uso del condón como parte de una vida sexual saludable, y para ello había que dirigirse a la juventud en sus propios términos y sin rodeos.
Por primera vez se hablaba de sexo con naturalidad y sin culpabilidad en televisión, invitando a abrir temas que habían sido silenciados durante décadas al debate público, en escuelas, medios de comunicación y en el seno de las propias familias. Por supuesto, también fue una campaña discutida, especialmente en determinados sectores sociales, pero su impacto social y cultural fue perdurable y quedó grabada para siempre en el imaginario colectivo de todos los españoles de aquella generación, que tal vez por eso mismo machacó a las siguientes con el tema de la protección.
Las ITS se disparan
Sin embargo, tres décadas después después parece que su huella se ha difuminado. La sociedad actual parece haberse relajado en el uso del preservativo en las relaciones sexuales y -paradójicamente, en un momento en el que la información está más al alcance de la mano que nunca- se percibe cierto desconocimiento sobre qué relaciones sexuales son de riesgo y cuáles no. Como consecuencia, las ITS se disparan. Según datos del Instituto De Salud Carlos III, desde el inicio de la década de 2000 se observa un aumento en la incidencia de infecciones como la gonorrea, la sífilis y la clamidia, y no solo entre los jóvenes, sino también en la generación del 'Póntelo, pónselo'.

¿Por qué se están triplicando los casos de transmisión de ITS entre mayores de 60? Para empezar, sin el riesgo de embarazo se suele minimizar el uso de preservativos, que siguen siendo la principal barrera de defensa contra estas infecciones. Además, los 60 de ahora no son los de antes. El uso de medicamentos como la viagra que permiten una vida sexual más activa y el consecuente aumento de parejas sexuales en la madurez son otras de las razones que explican este alza.
"Hoy en día, los adultos de mayor edad son más dados a participar en la cultura de los contactos, con encuentros casuales y sexo sin preservativo, unas prácticas que podrían verse fomentadas por la disponibilidad de fármacos para la disfunción eréctil, la generalización de la vida en comunidades de jubilados y el aumento del uso de aplicaciones de citas para mayores”, señala Janie Steckenride en un artículo de 'The Lancet'.
“Hay un cambio social demográfico bastante grande. Ha aumentado la divorcialidad en estas generaciones. Son personas que han estado en parejas estables durante muchos años y ahora se encuentran en una situación nueva”, explicaba Juan Manuel García, catedrático de Sociología de la Universidad Pablo de Olavide, a Informativos Telecinco. Además, existe un infradiagnóstico de estos casos porque no se habla.
La situación no mejora entre los más jóvenes. El 35% entre 15 y 18 años dice mantener relaciones sexuales, pero solo el 65,5% de ellos admite que usó preservativo en su última relación sexual, según datos del Ministerio de Sanidad. Vuelve a imponerse la creencia del 'a mí nunca me va a pasar'. Hay tanta desinformación que hoy sería más oportuno que nunca recuperar iniciativas como aquella que hace 35 años supo generar un cambio real en la conciencia colectiva sobre el sexo seguro.
