Síntomas del síndrome fleboartrósico que no debes confundir con otros trastornos en la menopausia
No es siempre resulta sencillo diagnosticar este síndrome, lo que retrasa el tratamiento
Cinco síntomas de la menopausia que nunca hubieras relacionado con ella
MadridCada etapa de la vida es diferente y en todas se producen cambios que pueden alterarnos a varios niveles. En el caso de las mujeres, una de las etapas más destacadas y más invisibilizadas es la rodea a la menopausia, esa época de la vida en la que se retira la menstruación (en realidad no se considera como tal hasta que no se pasan doce meses sin ella) y todo lo que ello conlleva.
Porque si bien es evidente que hay ciertas ventajas, también suele venir acompañada de síntomas que no siempre son bienvenidos y que pueden llegar a interferir con el día a día. Hay síntomas físicos o emocionales que pueden alterar el sueño, disminuir la energía o afectar al estado de ánimo.
Algunos son más conocidos y habituales, como los sofocos, otros no lo son tanto, como el síndrome fleboartrósico, que afecta más a las mujeres a partir de los 50 años y durante la menopausia. También es más probable desarrollarlo en caso de tener problemas de sobrepeso o de obesidad y puede verse de manera más frecuente en mujeres con profesiones sedentarias.
Síndrome fleboartrósico en la menopausia, qué es y cuáles son sus síntomas
No siempre resulta sencillo diagnosticar este síndrome porque puede confundirse con otras patologías reumatológicas o circulatorias, lo que retrasa también su tratamiento. "Es más frecuente en mujeres post menopaúsicas, sobre todo si estas presentan sobrepeso, obesidad, osteoporosis y sedentaridad, ya que estos son los factores de riesgo que favorecen su aparición", señala la Dra. Maya Gracia, especialista en Medicina Vascular y Angiología en conversación con Mujer.es.
El síndrome fleboartrósico se manifiesta especialmente en las extremidades inferiores y genera síntomas como pesadez e hinchazón en las piernas y varices, dolencias que, de no ser tratadas de la manera adecuada, pueden derivar en trombosis, hemorragias varicosas o úlceras. Condensa dos patologías, la insuficiencia venosa y los problemas articulares, por lo que también puede manifestarse con dolor, rigidez articular o pérdida de movilidad.
Tan importante es el tratamiento como la prevención, para evitar que llegue a aparecer es importante cuidar la alimentación y hacer ejercicio físico, mejorando tanto la circulación como la masa muscular. Apostar por alimentos con propiedades antiinflamatorias, como los pescados ricos en Omega 3 o los que contienen grasas saludables, entre otros.
En cuanto al tratamiento, la experta señalaba la importancia de mantenerse en el peso adecuado, aumentando la masa muscular gracias al ejercicio, también destacaba que, por ser un síndrome que se compone de dos patologías, ambas han de ser tratadas. Por ejemplo, en le caso de la insuficiencia venosa, puede ser necesario tratar las varices con la técnica que sea más adecuada. En cuanto a la artrosis, son varios los enfoques que pueden emplearse, desde fisioterapia, al uso de analgésicos y corticoides si fuera necesario, así como la intervención quirúrgica en caso de que fuera necesario.
Para el diagnóstico, el especialista realizará un examen físico y también algunas prueba para confirmar el diagnóstico, como radiografías, ecografías o densitometría ósea.
