Okupas

Un exmiembro de ETA contrata a Desokupa para desalojar a los inquilinos de su vivienda en Bilbao

El propietario y exetarra contrató a Desokupa para desalojar a sus inquilinos.. Europa press
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BilbaoLa intrahistoria de la desocupación frustrada esta misma semana en Bilbao tiene como insólitos protagonistas a la empresa Desokupa y a un exmiembro de ETA. Una alianza inverosímil que acabó con este último pidiendo ayuda a la Ertzaintza y con estos "especialistas en recuperar tu vivienda okupada de forma rápida y efectiva" saliendo escoltados por los agentes policiales. Una vecina de Bermeo recupera su casa tras dos años ocupada.

A principios de esta semana, el lunes 3, cuatro miembros de la empresa Horus Desokupa abandonaban la calle Mena del barrio bilbaíno de San Francisco, presionados por la movilización ciudadana y escoltados por la Ertzaintza. Sin lograr su objetivo, desalojar la vivienda del propietario que les había contratado.

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Hasta ahora, se sabía cómo se habían marchado, pero no el modo en el que Desokupa había llegado hasta el corazón de Bilbao. Pues bien, al parecer y según publica El Correo, el dueño del piso es Josu Álvarez, un ex miembro de ETA condenado por pertenencia a organización terrorista, hace casi dos décadas, por ayudar a huir a Francia a otros etarras.

"Nazis" en el barrio

Álvarez habría contratado el lunes a Horus Desokupa para desalojar a sus inquilinos. Los cuatro integrantes de esta empresa, que se autodefine como especialista en desocupación legal en España, acudieron a la bilbaína calle Mena con sus cabezas rapadas, vestidos de negro, con chalecos de protección y luciendo banderas de España.

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Se apostaron en el portal y su presencia no pasó desapercibida. Cerca de un centenar de personas se movilizaron para evitar el desalojo y se vivieron momentos de tensión, en los que los allí congregados increparon al dueño del piso y exmiembro de ETA por llevar “nazis” al barrio. Según la publicación vasca, la situación llegó a un punto en el que Josu Álvarez pidió ayuda a la Ertzaintza porque se sentía amenazado.

Finalmente, las patrullas de la Policía Vasca desplazadas al lugar tuvieron que escoltar a los cuatro miembros de Desokupa que abandonaron Bilbao entre silbidos y gritos de “A casa” y “Fuera”.