La compañía sueca SPT es experta en estos trabajos en profundidad. La precisión de su geolocalizador está fuera de dudas. Se trata de una giroscopio que entra por el pozo y hace una descripción 3D del terreno.

Sus mediciones han detectado un recodo de desviación en el tubo de de 61 cm, justo en el tapón y a partir de esa capa sólida va a hacer una radiografía en busca de Julen. La experiencia de esta empresa es una garantía. Ellos fueron quienes localizaron y consiguieron sacar con una cápsula a los 33 mineros atrapados bajo tierra en Chile en 2010.