La salud mental no es un tema que se deba menospreciar. En los últimos años, el número de suicidios en menores se ha multiplicado exponencialmente. Es un tema de salud que acarrea a todos, por ello, el Congreso ha aprobado crear un permiso laboral para acompañar a personas en riesgo de suicidio.
Wendie Renard, la defensa y capitana de la Selección Francesa de Fútbol, ha decidido no acudir al próximo Mundial de Australia y Nueva Zelanda con su selección para preservar su "salud mental".
“Es un día triste pero necesario para preservar mi salud mental. Tengo el corazón roto y con este mensaje le quiero contar mi decisión de dar un paso atrás con el equipo de Francia”, ha expresado la central del equipo francés del Olympique de Lyon. La noticia ha hecho saltar todas las alarmas en Francia, que ha quedado en 'shock' después del anuncio de la estrella mundial de 32 años en su Instagram.
La central fue nombrada como capitana de la selección femenina en 2013, brazalete que ha portado con orgullo durante todo este tiempo al frente de la selección francesa, hasta su reciente renuncia para cuidar su "salud mental". “Desafortunadamente, no jugaré esta Copa del Mundo en tales condiciones. Mi cara puede enmascarar el dolor, pero el corazón sufre... y ya no quiero sufrir”, añadía en el comunicado.
Durante su extensa carrera profesional como futbolista, que comenzó en 2006, la defensa francesa ha conseguido un gran palmarés formado por catorce títulos de la liga francesa y ocho Ligas de Campeones con el Olympique de Lyon. A nivel internacional suma 142 convocatorias con la selección ‘bleu’ y este año quedó la octava en la clasificación del Balón de Oro. “He defendido la camiseta de mi país 142 veces con pasión, respeto, compromiso y profesionalidad".
La salida de la defensa ha provocado un gran revuelo dentro de la selección femenina. Wendie ha comunicado que su salida se debe a los quebraderos de cabeza que le supone un descontento con la actual seleccionadora, Corinne Deacon y su cuerpo técnico, por lo que posiblemente no vuelva a equiparse con la camiseta de 'Les bleues' hasta que no sean destituidos. "Amo a Francia más que nada, no soy perfecta, ni mucho menos, pero ya no puedo respaldar el sistema actual, lejos de los requisitos requeridos por el más alto nivel”, afirmaba la futbolista en Instagram.