Las obsesiones de Donald Trump: un botón para refrescos en el Despacho Oval y estrenar un patriótico Air Force One

En su frenético regreso a la Casa Blanca, Donald Trump ya ha recuperado dos de sus viejas obsesiones. La primera es el famoso botón para pedir refrescos en su escritorio, un dispositivo implementado durante su primer mandato donde explicó que tan solo tenía que presionarlo para que le trajeran su bebida favorita. Ahora, este artilugio se ha vuelto a ver en su mesa, informa Beatriz Palomar.

Su vicepresidente, J. D. Vance, comentó entre risas en una entrevista para 'Fox News' que, hace poco en una reunión, Trump pulsó el botón rojo y él mismo se asustó y le preguntó que si todo iba bien a lo que el presidente contesto "sí, solo he pedido un refresco".

Donald Trump desea estrenar un nuevo avión presidencial durante su mandato

En el Despacho Oval, el republicano también ha vuelto a colocar una maqueta de un Boeing 747, su segunda obsesión. Trump quiere estrenar un avión presidencial, uno más patriótico con los colores de la bandera y más moderno. Así pues, este tema se ha convertido en prioritario en su agenda.

No obstante, las turbulencias entre Trump y Boeing no hacen más que crecer ya que la compañía lleva años de retraso en la entrega de los dos nuevos aviones que sustituirían a los que se usan de forma indistinta desde hace más de 30 años. "Vamos a tener un nuevo Air Force One si Boeing lo termina de una vez", dijo Trump mostrando su enfado la semana pasada. Por ello, ha pedido ayuda a su aliado Elon Musk para que presione a la compañía y acelere los trámites o busque alternativas para así poder disfrutar de su refresco favorito a bordo de su nuevo avión.

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