El suceso tuvo lugar en un puesto policial del distrito, situado en la norteña provincia de Kunduz, dijo a Efe el gobernador provincial, Mohamed Omar.
Los policías dormían cuando se produjo el ataque, añadió Omar, quien precisó que las autoridades han abierto una investigación para determinar lo sucedido.
El ataque fue reivindicado por un portavoz talibán, Zabiulah Muyahid, quien dijo que sus milicias acabaron con las vidas de diez policías.
Aunque situada en el norte relativamente tranquilo de Afganistán y lejos de los principales bastiones de los insurgentes en el sur y este del país, Kunduz tiene varias bolsas de población pastún, la etnia de la que proceden tradicionalmente los talibanes.