Un bebé de solo 11 meses ha sido ingresado en estado muy crítico tras recibir tres disparos cuando se encontraba en el interior de un coche en el norte de Filadelfia, Pensilvania (EEUU).
Los hechos ocurrieron la noche del sábado cuando la madrastra del niño estaba conduciendo. La mujer, que se percató de que había un tiroteo, avanzó algunos kilómetros para huir de los disparos.
Cuando frenó el vehículo, vio cinco agujeros de bala y se dio cuenta de que el bebé había recibido tres disparos, según publica NBC Philadelphia. Concretamente, el niño sufrió heridas en la cabeza, el pecho y las nalgas, por lo que se encuentra en estado extremadamente crítico.
La Policía aún no ha detenido a nadie y no se ha publicado información sobre ningún sospechoso.