Los médicos aseguran que la señora Trumbull tuvo mucha suerte al salvar la vida, porque cuando fue recibida por el hospital de Mackay había perdido mucha sangre.
La mujer contó que hacia 'snorkel' cerca de las islas Whitsunday, en el estado australiano de Queensland cuando sintió "un tirón potente" y ya "sabía lo que era". "Me di la vuelta y vi un gigantesco tiburón", explicó desde el hospital su experiencia.
"Entonces pensé, 'este tiburón no se va a salir con la suya, así que empecé a golpearlo en la nariz, a golpearlo, golpearlo y golpearlo. Luego me tiró hacia abajo del agua, pero muy poco porque empecé a patearle en el cuello", dijo.
La mujer, que nadaba al lado de un yate de paseo, fue auxiliada tras una "lucha de tira y afloja" con el tiburón de 1,5 metros.
Reveló que no sintió dolor, a pesar de que veía bastante sangre a su alrededor y sabía que estaba herida.
En el barco recibió los primeros auxilios antes de ser trasladada de urgencia al hospital de la base Mackay, donde fue operada.
"Estimamos que perdió aproximadamente 40% de su volumen de sangre y fue necesario suministrarle varias unidades de sangre", señaló el cirujano Mark Flanagan. La mujer tendrá que someterse a una intervención para reconstruirle el trasero.