Los padres de la menor, quienes pidieron no ser identificados, alegan que los oficiales de la aerolínea los sacaron de la nave bajo la sospecha de que su hija Riyanna era una posible terrorista, según publicó una cadena local de televisión.
Un empleado de la aerolínea se acercó a la familia cuando el avión estaba a punto de despegar y les pidió que bajaran para que un representante de la Agencia de Seguridad del Transporte (TSA, por sus siglas en inglés) quería hablar con ellos.
Cuando la madre de la niña preguntó los motivos, el empleado de la compañía JetBlue respondió que no se trataba de ella ni de su esposo, sino de la pequeña que aparecía identificada en la lista en la que aparecen personas buscadas por actos vandálicos y terroristas, conocida en EEUU como 'no fly list'.
Luego de una media hora de espera, las autoridades les indicaron que podían regresar al avión sin ofrecer disculpas, ni explicaciones. La pareja, sin embargo, rehusó volver a la nave.
La compañía JetBlue aseguró que todo había sido responsabilidad de la Agencia de Seguridad de Transporte, pero estos djeron que no investigarán el incidente, porque es responsabilidad a la aerolínea.
TSA añadió que, Riyanna y sus padres obtuvieron los billetes para volar con antelación, lo que significa que ya tenían autorización de seguridad y por lo tanto era imposible que la niña estuviera en una lista de exclusión.