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Elizabeth Grisby es repartidora. Estaba trabajando con su hija de un año cuando dos personas robaron el coche mientras ella hacía una entrega en condado de Dekalb, Geordia, EEUU. Rápidamente la policía emitió una alerta para dar con la pequeña.
La niña estaba en el asiente trasero del coche mientras su madre trabajaba. Eran las 2 am cuando Elizabeth se bajó del coche para hacer una entrega y lo dejó encendido. Dos individuos aprovecharon ese instante para robarle el coche, sin saber que había una bebé dentro.
La policía emitió una alerta ámbar para localizar cuanto antes a Royalty Grisby, según ha explicado el capitán de la policía del condado de Dekalb, Brian Deloach.
Grisby corrió tras los sospechosos al ver como se llevaba su coche con su hija dentro pero no se detuvieron, explica la cadena NBCNews.
Las autoridades encontraron el Nissan Armada 2010 marrón de Grisby, pero los sospechosos y Royalty no estaban. Entonces la policía pidió la colaboración ciudadana para tratar de localizar a la bebé. “Cada adulto es crítico, ya que todos los que tienen ojos en las redes sociales, Facebook, lo que sea, estén atentos a la Alerta Amber”, dijo Deloach
La madre, desesperada y entre lágrimas, pidió a quienes tuvieran a su hija que la devolvieran. Grisby dijo que, a menudo, trabajaba de noche mientras la niña dormía, en una zona residencial cerca de su casa en la que nunca imaginó que algo así podría ocurrir.
"No me importa el coche, no me importa nada de eso. Solo quiero a mi bebé, eso es todo lo que me preocupa", explicó la madre.
Finalmente la niña fue localizada el jueves por la tarde, 13 horas después de su secuestro. No han trascendido detalles, ni siquiera sobre su estado, si sufrió heridas o algún daño. Solo se ha informado de que Royalty está ya de nuevo con su madre.