La cantante, que ya tiene un niño malauí adoptado en 2006, David Banda, de tres años, podría quedarse legalmente con su nueva hija a mediados de esta semana.
"Estoy extasiada. Mi familia y yo estamos deseando compartir nuestras vidas con ella", dijo la artista a través de su portavoz, Liz Rosenberg.
La artista obtuvo el beneplácito del tribunal después de que una primera sentencia hubiese denegado su petición debido a que el proceso de adopción requería que los nuevos padres viviesen en el país durante un período de hasta casi dos años.
El hecho de que Madonna sea una mujer divorciada y la reivindicación del supuesto padre biológico de la niña que reclamó la patria potestad, jugaron en contra de las intenciones de la estrella del pop en un proceso de meses.
"Estoy extremadamente agradecida con la Corte Suprema por aprobar mi solicitud para adoptar a Mercy James", añadió Madonna.
Finalmente, los magistrados de Malaui descartaron el requisito de la residencia temporal en el país al considerarlo "una vieja ley".
Se calcula que Madonna podría ejercer de madre con Mercy James desde esta semana.
"Su pasaporte está siendo preparado y Madonna y Mercy deberían estar juntas para el miércoles", indicaron fuentes judiciales del país africano a US Weekly.