Un 'premio' ligeramente suavizado por las condiciones de cobro. Para que las primas comiencen, los jugadores deben llegar al menos a cuartos de final. Si no, no verán ni un duro. A partir de este cruce, los emolumentos irán aumentando. Pasar de octavos, 60.000 euros. Alcanzar las semifinales, 90.000 euros. Llegar a la gran final, 120.000 euros. Ganarla, el premio gordo.
Se trata de la prima más alta negociada para una selección en el presente campeonato del mundo. Ni siquiera Inglaterra, Argentina o Brasil cobrarán tanto si se proclaman campeonas. Además, la cifra que recibirán los hombres de La Roja es tres veces mayor que la que percibieron en 2008 por proclamarse campeones de Europa. Entonces, cobraron 215.000 euros.
Tampoco saldrán con las manos vacías las federaciones de fútbol de los primeros clasificados. La que gane el campeonato recibirá de manos de la FIFA 30 millones de euros. La segunda clasificada, percibirá 24 millones, la tercera 20, la cuarta 18 y desde la quinta a la octava selección percibirán 14.
Tanto si ganan como si pierden el Mundial, los jugadores de La Roja estudian ya la fórmula para donar parte de lo que ganen durante el campeonato a diversas ONG's y entidades con fines sociales. La idea es que el dinero no salga de África para ayudar a los niños del país.
JNP