Según informa el diario británico Daily Telegraph, Miss Fakih nació en el Líbano pero llegó con menos de un año a Michigan, donde estudió en un colegio católico. El Líbano es una encrucijada de culturas en la que conviven cristianos y musulmanes, entre otros. Quizá eso le permitió integrarse con más facilidad en una ciudad de la que sería años después designada como mujer más bella.
Rima declaró, poco después de recoger el premio, que conoció su destino cuando cruzó su mirada con Donald Trump, a la sazón propietario y organizador del evento, en colaboración con la cadena privada NBC: "Es la misma mirada en la que en su programa utiliza para nominar o expulsar a un candidato". "Es una buena chica", responde el organizador.
Pero Rima se lo puso difícil a sí misma. En el último desfile, con el traje de noche, la norteamericana estuvo a punto de caer al pisarse el vestido. "Esto no puede suceder cuando concurse en 'Miss Universo', declaró "Miss USA". En esta ocasión, su belleza y sus orígenes la han hecho famosa.