Violencia obstétrica: ¿Por qué no hay matronas suficientes en España?

La Organización Mundial de la Salud define la violencia obstétrica como “una forma específica de violencia ejercida por profesionales de la salud (predominantemente médicos y personal de enfermería) hacia las mujeres embarazadas, en labor de parto y el puerperio y por lo tanto constituye una violación a los derechos reproductivos y sexuales de las mujeres”. 

Esta realidad a la que se enfrentan numerosas mujeres en todo el mundo debe erradicarse lo antes posible y un factor clave para que eso ocurra es que las matronas puedan realizar su trabajo. Así lo muestra el informe “El Estado de las Matronas en el Mundo 2021”, realizado por la propia OMS, donde se expone que “la inversión en las matronas facilita que una mujer viva el parto de manera positiva, se presten servicios de aborto integrales eficaces y seguros, se mejoren los resultados en materia de salud, se aumente la disponibilidad de la mano de obra, se favorezca el crecimiento inclusivo y equitativo, y se promueva la estabilización económica”.

Faltan matronas en España

A pesar de las recomendaciones de la OMS, en España hay una enorme carencia de matronas, presentando uno de los porcentajes más bajos de los países pertenecientes a la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE). Concretamente, en nuestro país hay 12,4 matronas por cada 1.000 nacimientos, cuando la cifra media e idónea es de 25,9.

Tanto es así que el Sindicato de Enfermería Satse asegura que la sanidad pública española tiene menos 8.000 matronas, lo que da un ratio de tres matronas por cada 10.000 mujeres, la mitad que en los citados países de la OCDE. 

Por su parte, la Federación de Asociaciones de Matronas de España apunta que hay 7.300 matronas en activo y que en los próximos cuatro años el 40 % de ellas se jubilará, lo que provocará un problema mayor, dado que en la actualidad no hay profesionales para reemplazarlas.

El motivo que esgrimen es que entre 1987 y 1994 se cerraron las escuelas de matronas debido a que incumplían los requisitos formativos marcados por la Unión Europea. 

¿Por qué se necesitan matronas?

Las matronas no solo son una figura fundamental durante los meses previos al parto, sino que sus funciones van mucho más allá. Tal y como exponía la propia FAME el pasado 5 de mayo –Día Internacional de la Matrona–, “las matronas están preparadas para proporcionar casi todos los servicios relacionados con el embarazo; son las profesionales de la sanidad que mejor preparadas están para atender el embarazo y el parto; y además acompañan a las mujeres desde la adolescencia, durante la edad fértil, durante el embarazo/parto/puerperio, así como en las pérdidas y el duelo perinatal, cuidan de los recién nacidos, durante la lactancia, durante la menopausia, en la salud afectivo sexual… Están ahí siempre, comprometidas con las mujeres”.

Así pues, el déficit de estas profesionales disminuye las garantías de atender correctamente a la mujer durante todas las etapas de su vida, especialmente en el tiempo que corresponde al embarazo, al parto y al puerperio, donde suponen un apoyo clave para resolver las dudas que las madres tienen desde que se encuentran en estado hasta que han de lidiar con etapas claves como la lactancia.