Depresión

Cómo ayudar a una persona que tiene depresión: pautas efectivas para saber cómo actuar

Es importante alertar sobre los pensamientos suicidas. Informativos Telecinco
  • Para ayudar a una persona con depresión se debe tener conocimiento acerca de lo que es la enfermedad

  • El proceso puede llegar a ser complicado y desmotivante debido a su complejidad

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Para aprender a tratar a una persona con depresión, es importante informarse adecuadamente de qué es exactamente, definirla de manera correcta, entender qué es y qué no es la depresión para conocer cómo es la realidad de alguien que sufre esta situación.

"La depresión es un problema psicológico. Tener información sobre el trastorno depresivo, sus síntomas y su tratamiento te permitirá detectarlo con mayor facilidad y empezar a prestar ayuda lo antes posible", afirma en una entrevista con Europa Press Salud Infosalus el psicólogo Máster en Psicología Clínica de la salud Sergio García Morilla.

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Considera que intentar ayudar a una persona con depresión puede llegar a ser "muy complicado" para la persona cercana al que lo padece. "Al querer a alguien queremos que deje de sufrir, y a veces, comos duros con nosotros mismos buscando una solución, y nos olvidamos de que hay un tiempo, un proceso de cambio y de aceptación, de pérdida y de duelo, y que esas personas sufren porque se sienten solos, porque siente que nadie les entiende, porque han perdido algo, por ejemplo".

La importancia de separar a la persona del problema

El psicólogo destaca la importancia de diferenciar a la persona del problema, y así evitar juzgarla, así como la estigmatización de la "enfermedad mental".

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"El decir 'no eres una persona depresiva', eres una persona que sufre depresión' es importante por muchos motivos. Entre ellos desplaza el problema al ámbito de la esfera relacional con el contexto, con el contexto, con las condiciones materiales, con los demás, y lo aparta de la carga individual del sujeto, siendo más justo con esa persona, permitiendo más posibilidades de cambio, y reduciendo el estigma. No es lo mismo 'ser' que 'sufrir', o que 'tener'" , añade.

En opinión de García Morilla, las etiquetas aglutinan características y allanan el conocimiento si es usan con un fin adecuado como, por ejemplo, los profesionales de la salud mental en la diagnosis.

"O por el contrario, poseen unfactror limitante y estigmatizante si las aplicamos arbitrariamente al sujeto. A una persona que sufre depresión hay que decirle: 'Tú no eres tu problema o tu enfermedad, sino que tú sufres este problema', y en el espacio que genera esa separación semántica se gana identidad, autocontrol y esperanza de cambio centrado en uno mismo. Entender este problema en su complejidad, donde le añadimos los elementos que son 'ajenos' a la persona, permite entenderlo y gestionarlo mejor", subraya el psicólogo clínico.

Compromiso con la persona con depresión

Apuesta también por el "estar ahí" al ayudar a una persona con depresión. Debe ir más allá de estar físicamente, sino que se debe mostrar un compromiso con la persona. "Cuando nos referimos a estar ahí hablamos de demostrar a la otra persona que puede contar con nosotros pasando tiempo con ella, permaneciendo a su lado sin juzgar, acompañándola de manera honesta y abierta. El acompañar sin presionar, el sugerir que realice actividades físicas (porque sabemos el enorme beneficioen la salud que tiene) sin juzgar si se niega es complicado y, en ocasiones, frustrante para el cuidador".

Considera que debemos hacer sentir importante para nosotros a la persona que sufre. "Por ejemplo, en lugar de decirle que 'tienes que moverte, es por tu bien' decirle 'necesito que me ayudes en esta actividad', 'me gustaría que me acompañes'. "Se tratra de involucrar a la persona dentro de un rol de sentido y de importancia en la vida social que le rodea", agrega.

Las tareas más simples, como hacer la compra o limpiar se pueden llegar a convertir en algo complejo: "No se trata de que asumas tú esas tareas, sino de que colabores en su realización, y puedes ofrecerte a acompañarle a hacer la compra, por ejemplo, y siempre de forma respetuosa, sin que ello suponga una disminución de su autonomía".

No pasar desapercibidos los pensamientos suicidas

Es importante alertar sobre los pensamientos suicidas y nunca percibirlos como algo que debe pasar desapercibido. "Nunca te tomes sus comentarios como 'llamadas de atención'. Habla con esa persona sobre el tema y si sospechas de que puede hacerse daño llama a Urgencias".

También advierte sobre el hecho de que cuidar o acampañar a alguien con depresión puede ser largo y desmotivante por el afán de que esa persona salga adelante inmediatamentre: "Esto tiene una base en nuestra incapacidad de lidiar con el dolor emocional propio y ajeno, donde se nos ha acostumbrado a apretar los dientes y a seguir adelante, a llevarlo en la soledad de nuestra intimidad, o a anestesiarlo con el último fármaco de moda, y también, no lo menospreciemos, el miedo a que la depresión conduzca al suicidio de la persona a la que queremos".

Establece que ese miedo al suicidio puede hacer que la persona cuidadora empiece a priorizar aspectos de su vida en función de la persona a la que cuida, y que esta no se dedique el tiempo suficiente a sí misma ni tenga momentos con su círculo social o descanse correctamente.