El coronavirus no solo afecta a los pulmones, los riñones también sufren daños

  • Así lo confirman dos estudios de EEUU y China

  • A los síntomas como vómitos y diarrea se suman los problemas hepáticos

  • La presencia de estos síntomas debería suponer la realización del test

Así lo han confirmado dos recientes estudios. El coronavirus no solo afecta a los pulmones sino que, además, también afecta al hígado. Los estudios han sido realizados en EEUU y China, y ambos han demostrado los daños que puede sufrir este órgano.

Esto se debe a que las células a las que se adhiere el virus se encuentran localizadas en gran proporción en el esófago, la vesícula y el intestino. La llegada a los hospitales de pacientes con síntomas como vómitos y diarrea y, posteriormente, positivos en Covid-19, hizo plantear la posibilidad de que también afectara al sistema digestivo. Pero, además, también se ha demostrado el daño hepático que provoca.

El estudio realizado en EEUU ha estado dirigido por Reem Sharaiha, gastroenteróloga y hepatóloga de la Universidad de Cornell, tal y como informa MedPage Today. Para ello, se han estudiado los casos de casi 1.100 adultos con coronavirus en Nueva York.

Una tercera parte de los casos analizados presentaban, al menos, un síntoma digestivo. La diarrea fue el síntoma que más veces se registró. Casi dos terceras partes, más de la mitad, tenían afectado el hígado. Aquellos que presentaban dolores hepáticos, solían ser ingresados y, en muchos casos, fallecían.

Por otro lado, el estudio procedente de China, llega desde el Hospital Universitario Sun Yat-sen de Cantón y ha sido publicado en The Lancet y se centró en numerosos casos registrados de enero a abril de 2020. "Los síntomas generales aparecieron en el 15 por ciento de los pacientes y el daño hepático en el 19 por ciento", declaró el autor de la investigación, Ren Mao. "A medida que aumentó la gravedad de la enfermedad, las lesiones hepáticas se hicieron más pronunciadas".

Por ello, es importante atender y tener en cuenta todo tipo de síntomas que puedan llevar a malos resultados clínicos, como pueden ser los daños hepáticos. La presencia de dolores gastrointestinales debe ser suficiente como para realizar el test a los pacientes.