EPOC: la enfermedad que afecta a tus pulmones y está en el punto de mira por el coronavirus

  • EPOC es una enfermedad que puede afectar a tus pulmones: descubre qué es y cuáles son sus principales síntomas

  • Causa más muertes que el cáncer de pulmón y es la tercera causa de muerte en España

  • La mayoría de casos está relacionado con el tabaquismo

A medida que avanza la pandemia por coronavirus, especialmente contagiosa en el núcleo familiar y los hospitales, se van conociendo nuevos datos sobre cómo afecta el Covid-19 a quienes se contagian (un kit de bolsillo están en pruebas para detectarlo en 45 minutos). Al fin y al cabo, al tratarse de un virus nuevo, su efectos y consecuencias tardarán en conocerse con exactitud.

Lo que parece claro es que quienes padecen enfermedades pulmonares como la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) constituyen, a partir de los datos que conocemos, uno de los colectivos más vulnerables ante el Covid-19. Ello se debe a que esta patología respiratoria puede complicarse en combinación con el coronavirus. ¿Qué es EPOC, cómo afecta a lo pulmones y cuáles son sus síntomas y causas?

¿Qué es EPOC?

EPOC es una enfermedad crónica inflamatoria de los pulmones que causa una grave limitación en la capacidad respiratoria, al obstruir el flujo de aire desde los pulmones. Algunos de sus síntomas son tos, ahogo, fatiga y producción de mucosidad. Se traduce en una dificultad continua para respirar especialmente incómoda, ya que produce también opresión en el pecho y sensación de agotamiento permanente.

Solo en España esta enfermedad genera alrededor de 29.000 fallecimientos cada año. Esto significa que EPOC causa causa más muertes que el cáncer de pulmón (21.000 fallecimientos) o el cáncer de colon (16.000), los tumores malignos de mama (7.000) o el VIH (1.091). Además, las personas que sufren EPOC tienen mayor riesgo de padecer enfermedades cardíacas, cáncer de pulmón y una variedad de otras afecciones.

El tabaco, factor de riesgo extremo

En cuanto a los factores que la provocan, entre ellos se encuentra la exposición a largo plazo a gases o partículas irritantes, en la mayoría de los casos del humo de cigarrillo. Además, el enfisema y la bronquitis crónica son las dos afecciones más frecuentes que contribuyen a desarrollar la EPOC. La primera consiste en la inflamación del revestimiento de los bronquios, que llevan aire hacia y desde los sacos de aire (alvéolos) del pulmón. En cuanto a la segunda, se trata de una afección en la que los alvéolos que están en los extremos de las vías aéreas más pequeñas (bronquiolos) de los pulmones se destruyen como resultado de la exposición dañina al humo de cigarrillo y a otros gases y partículas.

Aunque se trata de una enfermedad crónica, se pueden tratar sus síntomas y mantener una buena calidad de vida, además de reducir el riesgo de otras afecciones relacionadas.

¿Cuáles son los síntomas de EPOC?

Los síntomas de la EPOC tardan en aparecer, y ello ocurre cuando ya se ha producido un daño importante. Normalmente empeoran con el tiempo, especialmente si el paciente sigue exponiéndose a sustancias nocivas, como el tabaco. Estos son los síntomas más comunes de EPOC:

  • Dificultad para respirar, sobre todo durante la actividad física
  • Silbido al respirar
  • Presión en el pecho
  • Tener que aclararse la garganta temprano a la mañana, debido al exceso de mucosidad en los pulmones
  • Tos crónica que puede producir mucosidad (esputo), la cual puede ser transparente, blanca, amarilla o verdosa
  • Color azul en los labios o los lechos ungueales (cianosis)
  • Infecciones respiratorias frecuentes
  • Falta de energía
  • Pérdida de peso involuntaria (en los estadios más avanzados)
  • Hinchazón en los tobillos, los pies o las piernas
  • Son probables episodios de ‘reagudizaciones', durante los cuales los síntomas empeoran más que la variación habitual diaria y duran al menos varios días

A diferencia de lo que ocurre con otras enfermedades, la EPOC tiene una causa clara y un modo claro de prevención: la mayoría de los casos están directamente relacionados con el tabaquismo, y la mejor manera de prevenir la EPOC es no fumar o dejar de fumar lo antes posible.