Las mujeres embarazadas que llevan a cabo una ingesta considerable de comida después de las siete de la tarde, y que siguen dietas de menor calidad tienen el triple de posibilidades de sufrir retenciones de peso postparto de más de 5 kilogramos, según ha demostrado un estudio que han llevado a cabo los investigadores del KK Women's and Children's Hospital en Singapur.
Asimismo, varios estudios han evidenciado que el aumento de peso después del primer año de dar a luz puede ir asociado con un índice de la masa corporal. Además, la retención de estos kilos puede llegar a ser más perjudicial que en un caso normal, debido a que la grasa corporal retenida se deposita normalmente en el abdomen.
"Nuestros sistemas corporales han evolucionado para metabolizar los alimentos durante el día y descansar durante la noche. Por lo tanto, consumir más calorías por la noche que por el día no se ajusta al reloj natural de nuestro cuerpo, al interrumpir el ritmo metabólico en varios órganos como el hígado, el estómago, el páncreas y el tejido adiposo, lo que resulta en la interrupción del metabolismo. El consumo de más calorías por la noche también está estrechamente relacionado con una hora de acostarse más tarde y, por lo tanto, se asocia con el sobrepeso y la obesidad", explica Fabian Yap, uno de los autores del estudio, que se ha publicado en la revista 'Nutrients'.
Por lo que el consejo final de estos investigadores es que las mujeres embarazadas opten por una serie de recomendaciones durante su estado para que aseguren un suministro adecuado de nutrientes con el objetivo de prevenir el aumento y retención de peso. Uno de los ejemplos, es consumir una dieta con granos enteros, frutas, verduras y productos lácteos bajos en grasa, así como reducir los alimentos grasos, salados y azucarados.