El incendio del edificio Windsor y todas las circunstancias que rodearon su origen es uno de los mayores misterios de la historia de nuestro país. Han pasado ya quince años y los bomberos que quedaron atrapados aquel 12 de febrero han contado cómo lo vivieron y desvelan detalles que hasta ahora no se conocían.
El edificio Windsor, inspirado en el Rockefeller Center de Nueva York, era uno de los edificios más altos de Madrid con 106 metros de altura. Este miércoles se cumplirán 15 años de un pavoroso incendio que quedará en el recuerdo de todos los madrileños como uno de los incendios más espectaculares vividos en la capital.
Comenzó a arder sobre las 23:00 horas del 12 de febrero de 2005, cuando en su interior solo permanecían dos personas que fueron desalojadas. Las llamas empezaron en la planta 21 y se expandieron con tal rapidez que los bomberos dieron por perdido el rascacielos tras varias horas de lucha. Ardió durante dos días y trabajaron más de 200 bomberos.
Para Ricardo y José Antonio esta fecha marca su segundo nacimiento, porque aquella madrugada, tras hora y media de lucha contra las llamas por el interior del edificio, comenzaron a producirse derrumbes y varios grupos de bomberos quedaron atrapados.
José Antonio se quedó solo, en completa oscuridad y casi sin aire. “Tuve la suerte de poder reaccionar, rehacer el camino y justo cuando iba a salir me sacaron mis compañeros” declara. Su compañero Ricardo guarda en su memoria estos duros momentos. “Sacas a un compañero a rastras temiendo lo peor” cuenta Ricardo.
Tuvieron que dedicarse a rescatar a los compañeros y se jugaron la vida por intentar salvar el edificio. En ese momento solo pensaron en su trabajo y ahora pueden celebrar juntos su decimoquinto cumpleaños.