Detienen a una conductora kamikaze de edad avanzada que circulaba desorientada en la AP-7

La Policía de Algorfa, Alicante, ha arrestado a una conductora kamikaze de avanzada edad que a punto estuvo de causar una tragedia en la autovía AP-7. Un testigo avisó a las autoridades del peligro y una pareja de agentes se jugó la vida para detenerla. No es este el único caso de un kamikaze al volante en España en los últimos días.

La conductora kamikaze de Algorfa, en la Comunidad Valenciana, es una mujer de cierta edad, que mostró síntomas de desorientación y que padece enfermedad con un tratamiento incompatible con la conducción de vehículos, según la Policía Local.

Un testigo avisó a las autoridades locales de que había un coche conducido en sentido contrario en la AP-7 que estaba provocando maniobras bruscas y peligrosas en los demás conductores. Los demás conductores hacían “giros bruscos y frenazos, intentando evitar la colisión frontal" con la mujer, según informa el diario Información.

Los Policías de Algorfa evitaron una tragedia en la AP-7

Los agentes se situaron en la AP-7 para dar el alto a la mujer. Mientras uno paraba la circulación, el otro se puso en la vía para que el kamikaze se detuviera. No redujo la velocidad lo suficiente y el agente tuvo que dar un salto. Ambos se jugaron la vida.

Los policías, el oficial Bravo Dolz y el agente Mora Valenzuela, van a ser propuestos para felicitación pública, según indica la jefatura de la Policía Local de Algorfa.

Otros conductores kamikazes

En los últimos días varios conductores kamikazes han sido detenidos en las carreteras españolas. Hace unos días, otra mujer se dio la vuelta al llegar a un peaje de la R-3. No quería pagar y condujo en sentido contrario durante varios kilómetros hasta que la detuvieron.

Recientemente en Granada conductor irrumpió en la A-44 circulando con su vehículo en sentido contrario. El responsable de esta nueva infracción fue un hombre de 82 años que, en un despiste que pudo acabar en tragedia, se equivocó en una incorporación y llegó a circular durante casi 10 kilómetros, –aproximadamente 10 minutos–, en sentido contrario.