La historia de Pepe, despedido a los 50 años y parado de larga duración, veía como se acumulaban las facturas, hasta ahora

Estar en el paro nunca es fácil, las facturas se acumulan y no hay ingresos para combatirlas, sobre todo para las personas de avanzada edad. A partir de los 45 años cada vez es más difícil encontrar un nuevo empleo, por lo que el gobierno ha optado ofrecer ayudas económicas a las empresas que contraten a parados de larga duración para darles una nueva oportunidad laboral. Una empresa de Almería ha ido más allá y busca a personas mayores de 60 años para los que la mayoría de puertas están cerradas y su densa experiencia cuenta poco.

Este es el caso de José María y Pepe, que con sus ya pasados 60 años creían que no iban a volver a encontrar un trabajo. La empresa almeriense Cicue ha contratado a José María a sus 61 años, un hecho que le ha hecho eternamente feliz y que se encuentra muy agradecido con su nuevo trabajo como limpiacristales, del que aún se está formando.

Pepe, despedido de su empresa con 50 años, nadie le quería contratar por su avanzada edad

Como él, Pepe también lo pasó gratamente mal después de haber perdido su trabajo, "durante 5 o 6 años lo pasé realmente muy mal porque no podía pagar la hipoteca", asegura Pepe. Desde que fue despedido con 50 años de su empresa, hasta entonces solo había recibido algún contrato temporal esporádico, nadie quería comprometerse a contratarlo con su edad.

Pepe nunca tiró la toalla y siguió buscando activamente empleo hasta que dio con alguien que se interesó por él. "Yo lo que quería era trabajar y tener un suelo para mi casa", afirma Pepe, que durante muchos años ha estado sin una fuente de ingresos mientras se acumulaban las facturas. A sus 63 años está trabajando como limpiador en una comunidad de vecinos desde hace cuatro años y donde espera poder estar trabajando hasta que llegue su jubilación.

Lo de Pepe y José María no es una casualidad. Ambos tuvieron la suerte de recaer en Cicue, una empresa que no los discriminaba por su edad y los valoraba por su personalidad y ganas de trabajar. En la empresa almeriense lo único que buscan en un trabajador es "que tenga ganas de trabajar, sea buena gente y tenga buena actitud", asegura José Juan Gallardo, gerente de la empresa Cicue que ayuda a parados de avanzada edad como Pepe y José María. Con esa filosofía llevan trabajando 20 años, dando esperanza a aquellos que casi la habían perdido tras largos años en la cola del INEM.