El placer de veranear en el pueblo: Maderuelo, una fortaleza medieval de Segovia, es conquistada por los turistas

Muchos turistas llegan hasta Maderuelo, en Segovia, para comprobar el placer de veranear en un pueblo
La población de este bonito paraje de Castilla y León se multiplica hasta por veinte en los meses estivales
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Las playas del litoral español son el destino preferido de muchos ciudadanos para disfrutar de las vacaciones de verano, pero también lo son los pueblos. Algunos de ellos, como es el caso de Maderuelo, en Segovia, llegan a multiplicar hasta por veinte su población en los meses estivales. Otras personas, pese al aumento del precio, se decantan por los campings.
Durante siglos fueron inexpugnables sus altas murallas bajo las hoces del río Riaza. En invierno, apenas medio centenar de lugareños habitan sus casas de piedra. Sin embargo, al llegar el verano, Maderuelo, toda una fortaleza medieval de Castilla y León, es conquistada por los turistas. Y por su milenaria puerta entran como si fuesen invasores.
Muchos vuelven en esta época, desde la ciudad, al pueblo donde nacieron con el objetivo de apreciar su inigualable gastronomía y sus refrescantes baños en el pantano. Por supuesto, hay quien lo visita en busca de sus vestigios templarios, arte sacro o misterios escondidos. Una inmejorable opción para pasar unos días.