El reclamo para visitar Gibraltar no lo encontramos en los escaparates de las tiendas, sino en las boticas. Se trata de la viagra. El precio de la 'píldora del sexo' es tentador: de los 60 euros que cuesta en España, aquí ronda los 40. Se han disparado las ventas.
Y además de dinero se ahorran protocolos médicos, ya que en algunas farmacias las venden sin receta. Un negocio redondo con forma de rombo. Muchos la compran por necesidad, pero también son objetivo de los contrabandistas, que sacan grandes beneficios.
En los primeros cincuenta metros de la calle principal hay seis farmacias que las dispensan. Gibraltar ya tiene un nuevo atractivo: a los monos les ha salido competencia. EBP