"De forma interesante el atractivo facial se correlaciona negativamente con el nivel de cortisol plasmático, sugiriendo que el estrés reduce el atractivo en las mujeres”, señaló Markus Rantala, doctor finlandés que encabeza el estudio publicado en la revista 'Royal Society Biology Letters'.
Los investigadores han refutado esta teoría, que había sido confirmada previamente en rostros masculinos. Aseguran que el estrés es perjudicial para la fertilidad y, dado que consideran que "el atractivo facial es una señal del potencial reproductivo", las personas con menores cantidades de cortisol en el organismo podrían ser las más fértiles.
Con este estudio pretendían relacionar también el atractivo físico de las mujeres con una mayor inmunidad, pero no consiguieron su objetivo. Para ello, fotografiaron a las participantes, las vacunaron contra la hepatitis B y midieron la cantidad de anticuerpos producidos. De este modo comprobaron que la función inmune no resultaba vinculada por el atractivo facial.
"Nuestra principal conclusión es un poco decepcionante para nosotros, porque no encontramos que la inmunología esté vinculada al atractivo de las mujeres", ha afirmado el líder de la investigación.