Las autoridades que controlan la publicidad en Reino Unido (ASA, por sus siglas en inglés) han analizado las seis imágenes diferentes de la modelo y han concluido que la chica es apenas una niña, aunque la firma ha rechazado la prohibición argumentando que tiene 23 años.
En el anuncio de la discordia, la modelo va cuadro a cuadro perdiendo ropa en una especie de 'striptease' hasta que llega a la última foto donde deja entrever un seno.
La ASA ha subrayado que la censura del anuncio también responde a que la revista donde se ha publicado es un medio para público adolescente.
La marca estadounidense prohibida ha rechazado todos los argumentos y ha defendido su anuncio, porque en ningún caso la idea es ir desnudando a la modelo poco a poco, sino que el objetivo es mostrar las diferentes maneras de llevar la sudadera.
La firma, además muestra su sorpresa, porque su marca se promociona en más de 20 países y nunca ha sido censurada.
La empresa estadounidense, ahora bajo la mira del ente británico, es la misma que Woody Allen denunció el pasado mes de abril por usar su imagen sin su consentimiento. Un caso que terminó con un acuerdo entre el director de cine y la firma que lo indemnizó con cinco millones de dólares.