El parricida de Arcos confiesa que mató a su bebé siguiendo órdenes de su móvil
Isidro le ha contado al juez que se despertó y asfixio a su hijo con la mano. No quería hacerlo pero encendió su móvil y creyó recibir las órdenes para matar a su bebé. Un relato terrible que su abogada no acertaba a explicar. Asegura que después de taponarle la boca y al nariz "suavemente" puso al niño en el suelo y le besó. Después fue a despertar a Sara e intentó estrangularla. Así comenzó la pelea que algunos vecinos escucharon. Sara con un collarín y recién salida del hospital declaraba antes que su pareja.
Durante más de una hora Isidro se negó a abrir la puerta a la Guardia Civil. Cuando lo hizo asumió su culpa, y en el cuartel les explicó todo tipo de incoherencias. Habló de las órdenes que les daba el móvil y de una conspiración. Por la noche, en los calabozos, daba gritos y hablaba solo.
Tras la declaración ha sido ha sido sometido a una evaluación psiquiátrica. Mientras los forenses resuelven sobre su estado mental, el juez le ha encarcelado acusado de asesinato. Hasta hace pocos días la pareja había pasado por una separación y paradójicamente Isidro y sus padres cuidaron del bebé. Antes los servicios sociales estudiaron quitarles la custodia del pequeño al detectar falta de cuidado. Sara tiene otra hija de una relación anterior que está viviendo con su abuela.