Ya se pasó de 6 carriles a 4 durante las navidades. Ahora toca consolidar ese diseño. Primero será en la acera de los números pares, para lo que se necesita cortar un carril más. Algo que se irá señalizando tramo a tramo durante tres noches. Así solo quedarán tres carriles, pero solo hasta las seis de la mañana. Porque de la zona en la que se ha quitado de los pares se ha recuperado, de los impares, el que había original. Se aprovecharán los meses de vacaciones para acelerar los trabajos dejando solo dos carriles, que volverán a ser cuatro en septiembre. Y así hasta el final. Pero la nueva Gran Vía no solo tendrá más acera, también se incorporarán árboles. El objetivo: lograr que no solo sea un lugar de paso. Que la circulación, en esta arteria, esté más libre de humos y sea más peatonal.