Briana Delcampo, una joven de 18 años de edad, de Tucson, Arizona, donará a finales de mes uno de sus riñones a Isaías Hernández. Un niño de tan sólo 18 meses que nació con insuficiencia renal en etapa terminal. Pese a su corta edad el pequeño ha estado entrando y saliendo del hospital desde que su madre dió a luz.
En marzo, KGUN9-TV se hizo eco de que la familia de Isaías, quien ya llevaba varios meses requiriendo diálisis, habían iniciado una búsqueda desesperada de un donante vivo de riñón para el pequeño. "Necesita un trasplante de riñón, la diálisis es muy difícil para el cuerpo, especialmente para un bebé", dijo su madre, Terri Hernández, en el reportaje. Y es que según explicaba el doctor Jei del Centro Médico de Tun, quien llevará a cabo el trasplante, la diálisis a una edad temprana podría alterar el crecimiento normal y tener efectos devastadores a largo plazo.
Cuando Delcampo, se enteró de que Isaías necesitaba un riñón nuevo, se puso en contacto resultando ser la combinación perfecta. Pese a ello tanto tanto los padres de la valiente jóven como sus amigos no pudieron evitar mostrar su preocupación por la dificultad del trasplante pero pese a ello Briana decidió seguir adelante.
"Lo primero que me vino a la mente fue: ¡Me encantaría ser probado", dijo. "Yo les dije que quería hacerlo. Nadie iba a cambiar de opinión", dijo Delcampo.
La madre de Isaías confesó sentirse aliviada cuando los doctores le dieron la noticia.
"Estoy muy emocionado, feliz. La quiero. Ella es realmente parte de la familia ahora, para siempre", dijo.
Pese a su buena acción Briana admite estár nerviosa por la cirugía, programada para el 29 de mayo, a la vez que se muestra emocionada por compartir una parte de sí misma con Isaías.
"He vivido 18 años y he hecho cosas. Tengo que viajar y hacer cosas, llevar a cabo mis deseos y yo sólo quiero que crezca y sea capaz de hacer las cosas que yo hice. Vivir una vida normal ", dijo.