Cinco detenidos por echar anfetaminas en la bebida a una joven en una discoteca

  • Los hechos ocurrieron en una discoteca de Sevilla

  • La víctima acudió a un hospital y le diagnosticaron una intoxicación por esta sustancia

  • Hay cinco detenidos, entre ellos una amiga de la víctima que la "animaba a beber más"

La Policía Nacional ha informado de la detención de cinco personas en Sevilla, cuatro varones y una mujer, por su presunta participación en un delito de salud pública. Los cinco adultos, con edades comprendidas entre los 31 y los 43 años, están acusados de haber echado varias dosis de anfetaminas en la bebida de una joven, cuando se hallaban en una discoteca de la capital, el pasado día 2 de febrero.

La víctima comenzó a sentirse mal y acudió al hospital aquejada de mareo, debilidad y palpitaciones, entre otros síntomas, y una vez realizadas diferentes pruebas diagnosticas y toxicológicas le diagnosticaron intoxicación por anfetaminas. La joven negó en todo momento un consumo voluntario de dicha sustancia y puso los hechos en conocimiento de las autoridades, por lo que fue puesto en manos del Grupo de Investigación de la Comisaría de distrito de Nervión. La víctima contó a las autoridades "que había estado en una discoteca en compañía de unos amigos, tomando alguna consumición cuando empezó a sentirse mal".

Gracias a las declaraciones de testigos y el visionado de las cámaras de videovigilancia del bar de copas, los agentes constataron cómo uno de los varones que formaban parte del círculo de amigos de la víctima, "aprovechó cuando ella salió del local a fumarse un cigarro, para suministrarle varias dosis de anfetaminas en la copa que ella estaba consumiendo".

El resto de personas que acompañaban a la víctima, también detenidas, "coadyuvaron en todo momento al autor material", llevando a cabo labores de contra vigilancia "para evitar ser sorprendidos por el personal del local o por la clientela". Los cinco detenidos eran del entorno de la propia víctima y, entre ellos, una amiga "animó a la joven para que tomara más bebida intoxicada". "Gracias a que la víctima apenas ingirió un cuarto de copa, las complicaciones médicas no fueron más allá".

Los responsables fueron puestos a disposición judicial, quien decretó la prohibición de acercamiento y comunicación de todo tipo con la víctima, a la espera de juicio.