Día sin móvil: ¿Cuánto tiempo aguantarías sin mirarlo?

Informativos Telecinco 02/03/2019 10:43

Unirse a este reto, hará reflexionar a muchas personas sobre el uso que hacen del teléfono móvil. Tres de cada cinco españoles sufre nomofobia, la que es conocida como la enfermedad del siglo XXI, un trastorno asociado al miedo a salir de casa sin el teléfono móvil que se traduce en síntomas como ansiedad, pensamientos obsesivos y catastróficos e incluso taquicardias y dolores de cabeza y estómago.

Esta enfermedad comparte características con otros trastornos de dependencia de sustancias como los del alcohol o las drogas. Su uso en sí mismo no es adictivo e incluso hoy en día es inevitable y necesario, se habla de dependencia cuando cuando su uso es excesivo, inadecuado y existe una necesidad patológica de estar pendiente de él sin perderlo de vista. Por esto, en las terapias para curar este tipo de adicción, el objetivo no es prescindir de él sino hacer del móvil un uso correcto, según comunica el centro de psicología psicoadapta.

¿Cómo puedes saber si tienes dependencia al móvil?

Existen varias situaciones y hábitos clave para conocer si tienes cierta adicción al móvil. Si tu respuesta a la mayoría de estas preguntas es un sí, deberías reducir el uso que haces de este:

  1. ¿Tu móvil infiere en tu concentración en el trabajo o los estudios?
  2. Cuando se está acabando la batería o no hay cobertura, ¿sientes ansiedad o nerviosismo?
  3. ¿No te separas del móvil cuando estas en cualquier parte de la casa?
  4. ¿Lo revisas de forma reiterada aunque lo tengas todo el rato delante?
  5. ¿Utilizas el móvil cuando estás hablando presencialmente con otras personas?
  6. ¿Evitas el enfrentamiento físico con otras personas prefiriendo hacerlo con el móvil?
  7. ¿Utilizas el móvil en lugares o situaciones en los que está prohibido como el coche o el cine?
  8. Si te despiertas por la noche, ¿lo revisas?

Actualmente existen terapias tanto individuales como grupales para combatir esta adicción. Los más jóvenes son los más propensos a esta adicción, no es fácil desengancharse al móvil, internet y las redes sociales. Cada vez más jóvenes dejan de relacionarse personalmente con su entorno y sufren inestabilidad anímica por estar pendiente de quien les escribe o llama. Por eso, los terapeutas recomiendan que los niños no tengan móvil hasta los 14 o 15 años.

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