La familia de Diana Quer y la Guardia Civil, conmocionados por el sobreseimiento
El cierre de la investigación ha dejado rota y descolocada a la madre de Diana Quer. Y aunque el padre ha preferido explicar, sólo lo ha intentado porque se ha quebrado sin poder expresar tanta desazón. La misma angustia que hoy comparten los investigadores a los que el juez no ha escuchado para decidir unilateralmente el sobreseimiento provisional. Es lógica la sensación de que los ocho meses de trabajo se están tirando a la basura.
El cierre o sobreseimiento provisional lleva aparejado que las vigilancias que la guardia civil lleva a cabo sobre varias personas serán desveladas. Se sabrá quienes son los dueños de los coches que pasaron por el puente de Taragoña a la hora que el móvil fue arrojado. O quiénes son los dueños de una veintena de móviles que hicieron el mismo recorrido de Diana.
El juez, alentado por la fiscal retira las sospechas sobre todos los investigados; feriantes, amigos, novios e incluso un posible atropello de Diana fortuito. Al no ser Diana menor de edad, el juez no está obligado a seguir investigando, pero extrañamente si le pide a la Guardia Civil que lo siga haciendo.