El español que propone aviones de dos pisos para solventar la falta de espacio: "Podría revolucionar la clase turista"

  • Se llama Alejandro Núñez, tiene 21 años y es estudiante de Diseño Industrial

  • Su propuesta ha quedado semifinalista en los prestigiosos 'Crystal Cabin Awards', que destacan lo último en diseño de interiores de aviones

  • Muchas compañías internacionales se han interesado ya por su idea

Alejandro Núñez mide 190 cm de altura y estudia diseño industrial fuera de España, entre Inglaterra y Holanda. Viaja mucho y siempre en clase económica. Harto de que no le entraran las piernas en ningún asiento decidió buscar él mismo la solución. "Empecé a darle vueltas a la idea y me di cuenta de que si los asientos iban en dos alturas diferentes se solucionaba el problema", explica a NIUS el joven madrileño, de 21 años.

Así ideó Chaise Longue Economic Sit, el proyecto que está desarrollando junto a varios de sus profesores, en la Universidad TU Delft de los Países Bajos, y que ha conseguido colarse en las semifinales de los prestigios premios Crystal Cabin Awards, conocidos por destacar lo último en el diseño de interiores de aviones.

Lo que ha conseguido Alejandro hasta ahora es ya una auténtica proeza. Es el único estudiante que lo ha logrado y la única persona a título individual que ha llegado tan lejos en estos premios. Para que se hagan una idea, su propuesta compite con las de las compañías más potentes del sector, como Airbus o Boeing.

NIUS ha hablado con este joven madrileño para que nos de todos los detalles de su ingeniosa idea.

Pregunta. Tu propuesta está dando mucho que hablar a nivel internacional. Cuéntanos en qué consiste exactamente.

Respuesta. Está pensado para los aviones de clase económica y de media y larga distancia. Consiste en colocar los asientos del avión a dos diferentes alturas. ¿Qué ganamos? Pues que al ir una de las filas elevada sobre la otra hay más espacio para las piernas en ambas.

En la fila de abajo permite estirar las piernas completamente, casi como si estuvieses en una cama, que es muy recomendable para los vuelos largos en los que se pasan muchas horas sentados en la misma postura, de esta forma se puede cambiar de posición y favorece que la sangre circule, lo que aumenta el confort de los pasajeros.

En la fila de arriba también queda un espacio considerable y se podrían incluso cruzar las piernas.

P. ¿Pero cabrían esas dos alturas de asientos en un avión normal?

R. Cabrían perfectamente dentro de una cabina de avión actual, si se quitan los compartimentos de las maletas de arriba, en mi diseño ya está integrado otro espacio para el equipaje de mano.

Cada pasajero tendría su propio maletero, digamos, su propia caja, que sería de acceso individual. Con lo cual si necesitas coger algo de tu mochila no tendrías que levantarte y hacer que se levante el resto de la fila, como ahora. Si estás sentado en la fila de arriba, estaría localizado debajo de tu asiento. Si estás sentado en la fila de abajo, estaría directamente delante de ti, en un compartimento bajo, a la altura del suelo. Y no solamente cabría la maleta, seguramente habría espacio también para una mochila pequeña o un abrigo. Pero eso hay que definirlo todavía.

P. Una auténtica optimización del espacio...

R. Sí, y con la misma medida entre los asientos que la que existe actualmente, 32 inches exactos, que son poco más de 81 cm. Con lo cual las aerolíneas no perderían ningún tipo de capacidad en sus aviones, pero ganarían en satisfacción del cliente. El diseño del asiento también ofrece más ángulos de reclinación, así como un respaldo ajustable y un soporte cervical desplegable, todo pensado para ofrecer más comodidad al pasajero.

P. Todos ganan...¿Quizás por eso ya hay varias compañías interesadas en tu idea?

R. Aún no hemos recibido una oferta formal, pero es cierto que muchas se han interesado en la idea inicial y ahora también en su desarrollo. Ahora estamos fabricando un prototipo para poder hacer test este verano en Holanda.

P. Es algo que imaginaste y empezaste a desarrollar antes de la pandemia pero que sin embargo no puede ser más idóneo para la situación que vivimos...

R. Sí, empecé a trabajar en ello con mis profesores el Dr. Peter Vink, y el Dr. Wolf Song, cuatro meses antes de que llegara el coronavirus, pero luego comprobamos su utilidad para la situación actual. Cuando empezaron a proponerse divisores con cristales entre los asientos, nos dimos cuenta de que lo nuestro sería mucho más efectivo, porque la gente no va a la misma altura. Permitiría viajar a familias o grupos de personas de la misma burbuja en una fila y a otros en otra, porque hay una distancia grande, además los aviones cambian constantemente el aire. Sería un diseño muy seguro en tiempos de pandemia.

P. Eres muy joven, solo 21 años, ¿te imaginas que ganas el concurso, que en un plazo medio los aviones se transforman en lo que tú propones?

R. Uff, no quiero ni pensarlo. Ya estoy sorprendido con la repercusión que está teniendo mi idea como para imaginarla hecha realidad... El resultado del concurso no se conocerá hasta Septiembre. Y respecto a su materialización, en el mejor de los casos no sería algo inmediato, ni de un año ni de dos. Sería algo largo, por la cantidad de procesos por los que tiene que pasar, de seguridad, de estructuras, de investigación, etc

P. ¿Pero sueñas despierto con que se haga realidad?

R. Yo sueño con hacer diseños que de alguna forma cambien el mundo a mejor o cambien la vida de las personas positivamente.

P. ¿Crees que este proyecto logra ese propósito?

R. Por supuesto, creo que camba la experiencia de viaje, que es una de las cosas más importantes, desde mi punto de vista, que el viaje empiece ya dentro del avión, y no solo cuando te bajas de él y llegas a tu destino. Y creo firmemente que lo que hemos desarrollado ahora podría cambiar totalmente el mundo de la aviación comercial en clase económica, revolucionar la clase turista.

P. ¿La relevancia que está adquiriendo tu idea te agobia, sientes más presión o responsabilidad para que culmine con éxito?

R. Siento que ahora toca trabajar más aun para sacarlo adelante. Y me enorgullece mucho hacer un diseño español, porque en este ámbito de aviones o de cabinas de aeronaves no hemos hecho mucho. Es emocionante.

P. Me imagino que una mente inquieta como la tuya tendrá más proyectos en mente...

R. Claro, este último año de carrera he diseñado un sistema activo de alerta en vehículos que sirve para reducir mucho la cantidad de accidentes que se producen con coches estacionados por cualquier tipo de emergencia en las vías. Pero no te puedo dar más detalles porque seguramente habrá patente.

P. Otro diseño que mejora la vida de las personas...

R. Sí, es lo que me impulsa, lo que me empuja a crear, a avanzar, a crecer.,,