La familia de la joven sevillana confia en que el cuerpo sea finalmente encontrado. Antonio del Castillo ha explicado que no pierde la esperanza y que "muchas veces" se va a dormir con la "premonición" de que "mañana sea el día". "Siempre lo tengo en la mente", ha dicho el padre de la menor antes de que la madre lamentase que la familia tenga una "herida sin cerrar" y que este año "y todos los que vengan" la familia tendrá unas Navidades "muy dolorosas".
"Estamos contentos de que no sea un varapalo más para la familia y una de las pocas noticias buenas", ha asegurado Antonio del Castillo durante una rueda de prensa en Madrid en la que se presentó el libro 'Hay chicos malos. El caso de Marta del Castillo' (Paréntesis) que el periodista Alfonso Egea ha escrito sobre el caso.
La madre de la menor ha asegurado que la familia prefiere que sea un juzgado popular el que juzgue a los imputados porque considera que sus miembros tendrán un posicionamiento más social. "Tal vez estemos equivocados, pero pensamos que un jurado profesional se atendrá más a lo que dicen las leyes y el popular tendrá más en cuenta lo que llega a la sociedad", ha indicado.
"Fe en la justicia"
Marta Casanueva que su familia sigue "teniendo fe en la justicia" y que así continuará "hasta que no se demuestre lo contrario", una confianza que no se repite en el caso de la legislación vigente. "El que lea este libro va a entender que la ley está anticuada, que mentir sale barato y el encubrimiento, también", sostuvo la madre de Marta.
En su defensa del trabajo de la policía, Egea ha afirmado que la Policía buscó el cuerpo de Marta en otros muchos lugares además de los que han trascendido a la opinión pública, entre ellos un caserío en Utrera, después de que su propietario alertase de sus sospechas sobre un coche que pasó por la zona.
"Hay chicos malos"
El libro de Alfonso Egea recopila datos, documento y testimonios, entre ellos transcripciones del sumario y de llamadas telefónicas que ofrecen acercarse a la "verdad" sobre quién y por qué se acabó con la vida de Marta del Castillo. Egea aseguró que el mismo protege "al máximo" a todos los menores implicados, comenzando, como no podía ser de otro modo, por "la imagen y el honor" de la propia víctima.
Además, el autor ofrece una "radiografía" de la sociedad en la que viven los implicados y la "enorme brecha creada entre la sociedad de los adultos y la de los adolescentes". "Cómo ha sido posible que algunos chicos malos hayan mantenido en vilo a todo un país y a gran parte de las instituciones", se pregunta el autor, que destacó que entre todos los implicados únicamente tenían un antecedente penal por un robo, a diferencia de los autores de otros casos similares, con un gran historial delictivo a sus espaldas.
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