Los ciudadanos británicos han mostrado su descontento con la empresa responsable del crematorio de North East Lincolnshire Council, en la ciudad costera de Brimsby (Lincolnshire, Inglaterra), que multa a aquellos que están más tiempo de lo acordado disfrutando de la celebración, tal y como informa el portal web Qué.
“Parece que alguien está midiendo el tiempo con un cronómetro, y hace clic cuando alguien camina en la capilla y revisa el último que sale’, indicó el concejal de la localidad, Keith Brookes. “Quiero asegurarme de que ya no tengamos funerales que penalicen a las familias”, concluyó.
La duración de un funeral en este crematorio es de 40 minutos y tiene un precio de 620 libras. Las familias tienen la posibilidad de prolongar la duración del mismo si lo desean.
Por otro lado, el precio de la incineración sin ceremonia es de 233 euros, el mismo 'castigo' que se impone si se retrasa.