Los disparos de Amy mataron en el acto a Kayson, una joven promesa del fútbol americano. Kloee fue trasladada a un hospital cercano pero falleció una semana más tarde. La menor de los tres, solo fue atendida de varias heridas ocasionadas en el forcejo con su madre.
En su declaración ante la policía, según informa Infobae citando a medios norteamericanos, Amy aseguró que "creía que lo hacía para defenderlos de su padre, un hombre abusivo y peligroso" y afirmó: "Una parte de mí pensaba que los estaba salvando" porque, según ella, "él había amenazado con asesinarlos".
Amy y su exmarido mantenían una dura pugna legal tras separarse. Ella había interpuesto varias denuncias que, según el sheriff del condado había sido desestimadas por las autoridades judiciales. Su expareja, por el contrario, la acusaba de "maltratar psicológicamente a los niños".
Ingresada en el penal de cárcel del Condado de Okmulgee, Amy espera ahora el juicio dónde se intentará averiguar por qué actuó de esta manera. Mientras tanto, se ha limitado a expresar un lacónico "lo siento".
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