El milagro que se espera con Julen: el caso del bebé Jessica McClure que sobrevivió 58 horas en un pozo

telecinco.es 15/01/2019 12:14

Lo ha recordado hace apenas unos meses el diario Clarín. La historia de Julen recuerda como pocas a la del bebé Jessica McClure, de la se hizo incluso una película titulada 'El rescate de Jessica' y protagonizada por Beau Bridges. La tensión de 58 horas de angustia llevó al presidente de los EEUU a decir eso de todos somos baby Jessica. Con solo 18 meses la pequeña, que estaba jugando, cayó en un pozo de 20 centímetros de diámetro, resbalando por un hueco lleno de fango. Cuando el cuerpo se detuvo, estaba casi siete metros debajo de la superficie. Nadie se explicaba en su momento cómo pudo la pequeña caer en ese agujero cuando una piedra lo tapaba, pero la realidad es que estaba allí. El objetivo era salvarla como fuera.

Los expertos creyeron en un primer momento que podrían sacar a la niña del pozo sin dificultad, pero al cabo de un breve período de tiempo se dieron cuenta, como ha ocurrido en el caso de Julen, aún más complejo, de que no era posible. Policías y bomberos diseñaron un plan sencillo: perforar un pozo paralelo y luego un canal para rescatar a la pequeña, algo similar a lo que se está haciendo ahora en el caso de Julen. Alrededor de Jessica había piedra dura. En el caso de Julen el riesgo de desprendimiento es alto y el terror es que quede atrapado en el intento de rescate y no tengo oxígeno.

Al igual que ha ocurrido con Julen el boom de solidaridad fue brutal. Decenas de trabajadores locales de la industria petrolera, en su mayoría desempleados, se acercaron a echar una mano con sus herramientas.

Mientras el grupo de rescate bombeaba oxígeno en el pozo, otros mantenían la comunicación con la pequeña, que lloraba. Los trabajadores la animaban a cantar canciones de cuna. “Nunca voy a olvidar cómo cantaba la canción de Winnie, the Pooh”, diría después uno de los detectives según relata el diario Clarín que se hizo eco de la historia después de que la pequeña diera una entrevista a People ya convertida en toda una treintañera.

En solo 24 horas, el pozo paralelo estaba terminado (hay que tener en cuenta que en el caso de Julen hablamos de 100 metros, toda una odisea), pero el puente entre ambos agujeros se complicaba porque los martillos perforadores estaban diseñados para perforar hacia abajo, no a los costados. Un ingeniero en minas supervisaba el trabajo. Después de horas de silencio, Jessica volvió a emitir sonidos, y eso dio el impulso para seguir trabajando sin descanso. En el caso de Julen nadie ha parado de trabajar, día y noche, para que el milagro se produzca.

El túnel de contacto fue acabado cuando la pequeña llevaba ya 45 horas atrapada. Cada segundo contaba porque con solo 18 meses no había comido ni bebido nada y el oxígeno podía escasear.Ron Short, un hombre sin clavículas se ofreció a sacar a la pequeña pero no pudo. La tensión crecía. Nadie sabía bien cómo sacar a la pequeña. El elegido fue Robert O’Donnell, un paramédico del Departamento de Bomberos de Midland. Mientras arrojaba gelatina de petróleo para favorecer el deslizamiento, superó la claustrofobia hasta que llegó a Jéssica. Logró sacarla tras 20 minutos. La pequeña debió pasar por el quirófano 15 veces. No ha tenido Jessica una vida fácil desde entonces, pero ahora tiene dos hijos y reconoce que cada momento de su vida es un milagro. Esperemos que se repita con Julen.