El hallazgo de un lobo tiroteado por los furtivos en Ourense abre una investigación y reaviva el debate sobre su caza

  • Agentes forestales de Ourense han encontrado a un lobo tiroteado por los furtivos

  • La prohibición de la caza del lobo que promueve el Gobierno indigna a muchos ganaderos

  • Los defensores del lobo insisten en que puede y debe coexistir con el mundo agrario

Las autoridades han abierto una investigación después de que agentes forestales de Ourense, en una batida por el monte, hayan encontrado un lobo tiroteado por los furtivos. El ejemplar abatido era una hembra, y el suceso se produce en pleno debate por la prohibición de la caza de este animal que promueve el Gobierno, algo que indigna a muchos ganadores en aquellas comunidades donde sí tienen que convivir con el lobo y, afirman, tienen que soportar los problemas que causa en sus explotaciones.

Según exponen, nada más caer la noche permanecen alerta ante una posible incursión del animal en sus rebaños: “El lobo se pasea por el casco urbano. Antes te salía un lobo, ahora ya ves manadas”, cuenta Antonio Ferrero, ganadero en Castilla y León.

Solo en esta comunidad autónoma, el año pasado se produjeron unos 2.500 ataques de lobos al ganado, provocando la muerte de más de 4.000 reses y unas pérdidas económicas de unos 2 millones de euros.

Si yo sufro un ataque se me tiene que compensar de alguna manera”, dice Ferrero.

Los defensores del lobo aseguran que puede coexistir con el mundo agrario

Los ganaderos piden que se le pueda seguir cazando para así controlar su población, pero en el lado opuesto están los defensores, que inciden en que el lobo puede y debe coexistir con el mundo agrario con medidas de protección para el ganado y ayudas directas para quienes sufran sus ataques.

No es necesario matar al lobo para garantizar o para gestionar la convivencia con el hombre, con el ganadero”, subraya Miguel Ángel Garijo, animalista experto en estos mamíferos.

Ahora, la prohibición sobre su caza ha vuelto a reavivar el debate entre dos posturas enfrentadas: la de los ganaderos y la de los ecologistas.