La niña gallega que apareció muerta en su casa de Cospeito fue asfixiada por su madre

  • Hay rastros de medicación en la niña pero no suficiente como para ser envenenada

  • La madre de la niña está en el área de psiquiatría de un hospital de Lugo

Desirée Leal, la niña de siete años que fue hallada muerta en su casa de Cospeito, Galicia, fue asfixiada por comprensión, probablemente con una almohada, según se desprende del sumario del que se ha levantado el secreto. La madre permanece ingresada en el área de psiquiatría del hospital Universitario Lucus Augusti (HULA) pero cuando los médicos consideren que pueden darle el alta irá a prisión.

En el informe que revela que la niña de siete años Desirée Leal hallada muerta en su cama en la casa de su madre y su abuela en Cospeito, Galicia, fue asfixiada no se deja claro con qué objeto la mataron. Es probable, que fuera con una almohada, publica La Voz de Galicia, en la que encontraron restos de sangre.

En el sumario, del que se ha levantado el secreto, se acredita que la autopsia ha revelado que en la sangre y el estómago de la niña había cantidades mínimas de antidepresivos, no suficientes para una persona que los toma habitualmente. Además, en el pelo de la niña tampoco hallaron restos de ese medicamento.

La madre el día de los hechos dormía con su hija. A la hora de levantarse por la mañana se dirigió a la habitación de la abuela y le dijo “Desirée está muerta”. A la policía le contó que quizás la niña bebiera de la botella de agua con antidepresivos que había dejado en la habitación. Teoría descartada por los agentes porque la botella no estaba en la mesilla de noche, según explica el citado diario.

La jueza tomó declaración a la madre hace unos días en el Hospital Universitario Lucus Augusti (HULA) cuando sus médicos del área de psiquiatría consideraron que podía responder a las preguntas. La jueza ordenó su ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza por un delito de homicidio. No obstante, permanecerá en el hospital hasta que los doctores le den el alta.

La conmovedora carta del padre

Manuel Leal, el padre, dijo desde el primer instante que su hija no murió de forma natural y está dispuesto a pedir la prisión permanente revisable para su expareja. En una carta hace unos días dedicó unas palabras preciosas a su niña: “Eres el gran amor de mi vida, Desi. Daría cualquier cosa por escuchar tu aliento a mi lado”.