La policía investiga amaños en más partidos de la Primera División

  • Hoy han declarado 3 jugadores del Huesca

  • Ya han sido detenidas 6 personas y hay 20 investigadas

  • Las apuestas se multiplicaban por catorce

Leo Franco fue portero, entrenador y en la época de los presuntos amaños del Huesca era director de relaciones internacionales. Hoy salía de declarar como testigo pero con la boca cerrada “hay secreto de sumario”, decía. También ha declarado el consejero del club y el director general, José Antonio Martín Petón y Josete Ortas, muy preocupados por defender la integridad de la Sociedad Deportiva Huesca.

Pero la policía investiga al equipo como entidad jurídica porque el Huesca está en el centro de la trama. De la de blanqueo y de los amaños, posiblemente conectados. Se investiga el partido contra el Nastic que inició la investigación y otros dos al menos que levantaron sospechas en el mercado de apuestas. "Cuidado otra vez con el Huesca. El Huesca 2 - Valencia 6 tuvo números raros. El Betis 2 - Huesca 1 también. Para nosotros esos números eran raros". Lo dice Francesco Baranca de la Agrupación de operadores de apuestas contra el fraude deportivo. El problema es que la Liga lo niega, su presidente Javier Tebas lo ha dicho en rueda de prensa y después Iñaqui Arbea de la Comisión de Integridad que depende de la Liga, ha vuelto a decirlo. “Solo se detectaron sospechas en las apuestas de nueve partidos esta temporada, ninguno de Primera”. Los dos han dicho que contra esos partidos no hay datos de tongo.

En el partido contra el Nastic, sí, porque ya hemos contado que el Huesca falló goles uno tras otro y el Nastic goleó al final para conseguir la permanencia en el minuto 72. Todo salió según lo marcado por la trama de apuestas. Pero las entradas de dinero fueron 14 veces superiores a lo normal. Con esos indicadores los vigilantes del decoro en el deporte, pensaron en el amaño. Se lo han preguntado a Melero y Camacho, capitanes del Huesca y al jugador Álex Gallar. Han desfilado como testigos pero sorprende que solo les hayan llamado a ellos y no a todo el equipo, quizá por sus posiciones estratégicas. Dicen en la Liga que los peones contactados por los cabecillas para que predeterminen cualquier cosa que vaya a suceder, es decir, hagan jugadas marcadas tipo corner o falta, o incluso fallen goles estratégicos en la primera parte, por ejemplo, suelen ser capitanes, centrales o porteros. Íñigo López, ahora en el Depor, fue detenido ayer porque jugaba en el Huesca cuando se produjo esta partido. La pregunta que todo el mundo se hace es si el presidente detenido también lo sabía o participó.

La investigación sobre los cabecillas, Raúl Bravo y Carlos Aranda llevó a otro partido que la Comisión de Integridad tiene en su objetivo, el Valladolid- Valencia que permitió al equipo del Mestalla alcanzar la Champions. No porque se lo hayan regalado, pero sí porque alguno o algunos jugadores morados pudieron facilitar los goles con fallos defensivos. En este caso la policía tiene probado el contacto entre Raúl Bravo y el capitán Borja Fernández también detenido. La red cobraba 100.000 euros por amaño a repartir entre los peones y los cabecillas. El presidente de la Liga antes presidente del Huesca hoy ha explicado no está dispuesto a generalizar la trama de amaños “no está todo manchado” aunque la operación Oikos es una mancha que hay que limpiar. La llamaron así porque tanto Bravo como Aranda pasaron por Grecia, un país donde los amaños conectados a las apuestas parecen formalizados. Por eso a los que pasan por esos equipos “hay que mirarlos con lupa”.