La Policía Local de Santander ha denunciado al propietario de un perro por pasear al animal suelto en un parque infantil y sin vacunar contra la rabia.
El perro, que fue retirado por el servicio de recogida de animales, también estaba causando molestias entre los vecinos por sus "constantes ladridos" y estaba agresivo y "tirándose a morder" a las personas que transitaban por el lugar.
El suceso tuvo lugar a las ocho de la mañana en la calle Cuesta de la Atalaya, donde acudieron los agentes tras ser alertados por varios vecinos de la situación.
Esta denuncia se suma a otra dispuesta a otro hombre por llevar a su perro de una raza potencialmente peligrosa sin bozal en ese mismo espacio unas horas más tarde, pasada la medianoche.
Este otro propietario no tenía licencia para poseer perros de ese tipo de raza ni identificación para su mascota, que no contaba con cartilla sanitaria ni vacunación contra la rabia.