Hay novedades sobre la controvertida asociación Infancia Libre. La policía acusa a este grupo de ser una organización criminal en el informe que ha entregado a la Fiscalía. Los agentes consideran que coordinaban a toda una red de profesionales que elaboraban falsos informes psiquiátricos con el fin de quitar a los padres la custodia de sus hijos.
El informe contiene alrededor de 20 de casos parecidos a los ya conocidos porque las madres fueron detenidas. María Sevilla, la primera y presidenta de la asociación de infancia libre, que buscó apoyos políticos porque decía que de los 170 casos de abusos sexuales recogidos en Infancia Libre solo 3 estaban judicializados. No las creían decía mientras su hijo estaba secuestrado, recluido en una finca hermética, sin escolarizar.
Después llegaron los casos de Patricia González, Ana Maria Bayo y la ultima, Roció de la Osa, vicepresidenta de la asociación. Para esconder a sus hijos utilizaron la misma infraestructura.
Y para denunciar a sus exmaridos emplearon la misma estrategia jurídica que la policía tilda de torticera, para así conseguir con denuncias falsas y recursos que durante meses los hijos no vieran a los padres, acusados de maltrato o de abusos. La misma abogada y exjuez su compañero letrado y dos médicos, para conseguir los informes que desaconsejaban las visitas. Un modus operandi que podría considerarse organización criminal para la policía y que la fiscalía podría investigar.