Las lecciones de boxeo deberían ser obligatorias en todas las escuelas británicas, dicen los activistas contra el cuchillo. La iniciativa 'Gloves Up Knives Down' (GUKD) argumenta que aprender a boxear a una edad temprana enseñaría disciplina a los niños.
Afirman que el deporte y lograr que los niños se unan a algo en lugar de enseñarles a pelear podría ser la clave para combatir la epidemia de los crímenes con arma blanca. Añaden que "el boxeo puede ser una ruta positiva para proporcionar intervenciones positivas a los jóvenes en riesgo de delincuencia".
"Creemos que la disciplina y el respeto que aprendes a través del boxeo pueden tener un impacto positivo en la vida de los jóvenes, enseñándoles habilidades para la vida que pueden tener una influencia positiva fuera del gimnasio de boxeo", explican.
Dicho deporte no ha sido obligatorio en las clases de educación física desde principios de la década de 1960, cuando se esfumó gradualmente. Y una petición esta semana ha acumulado más de 2.000 firmas que ya requieren su reintroducción. Los famosos luchadores David Haye, Tyson Fury y Anthony Fowler han ayudado a promover la iniciativa. Los activistas que lo respaldan señalan que su ambición es "reducir la tasa de delitos con cuchillos alentando a los jóvenes a practicar el boxeo".
Su página web indica que "GUKD es una respuesta a la falta de respuestas significativas para frenar el crimen con cuchillo. Es una iniciativa de base y de alta visibilidad para alentar a los jóvenes a salir de las calles. El ambiente del club de boxeo, que cuenta con rigurosos arreglos de seguridad, enseña el riesgo y demuestra que las acciones tienen consecuencias, simplemente puedes ser golpeado si no te mueves lo suficientemente rápido. La diferencia entre la vida real y los juegos de computadora no podría ser más marcada".
Los delitos de cuchillo aumentaron un 7% en doce meses hasta finales de junio de 2019, según muestran los datos de la Oficina de Estadísticas Nacionales. Hubo 43.516 delitos con cuchillo entre marzo de 2018 y marzo de 2019. A principios de este año también se reveló que un número récord de padres están enviando a sus hijos a clases de defensa personal por temor a que los apuñalen.