Los comerciantes pakistaníes de Barcelona hartos de sufrir robos

  • Se han manifestado para pedir seguridad ante los atracos que sufren a diario

Es el último atraco. Armado con un cuchillo un encapuchado se lleva la recaudación. Nos lo cuenta Abdul, la víctima, no es la primera vez que le roban. "Te voy a acuchillar y se llevan la caja".

Los ladrones son extremadamente violentos. Siempre actúan igual. "Vigilan fuera y cuando no hay nadie entran con una pistola o con un cuchillo y si no les das nada te pegan", prosigue Abdul.

Tienen los golpes muy planeados, en uno hacen como que compran y de repente le pegan un botellazo al tendero para robarle la caja. Son situaciones casi cotidianas para los comerciantes pakistaníes de Barcelona. "Queremos más vigilancia y seguridad", dice un portavoz de los tenderos pakistaníes. Por eso han salido a la calle, para exigir más seguridad. Se sienten indefensos, vulnerables y por eso las ladrones se ceban con ellos porque muchos no denuncian. "Si lo haces tarda mucho tiempo, pierdes un día y el perjuicio económico crece", asegura Abdul. Con estos ingredientes los robos no paran de crecer.