Sergey Protosenyas es el presunto asesino de su mujer y su hija en un chalet de Lloret de Mar. Las primeras investigaciones apuntan a un crimen de violencia machista, en el que habría matado a su mujer y su hija con un hacha mientras dormían, y después se habría ahorcado en el jardín. Sergey Protosenya tenía una fortuna de más de 400 millones de euros y aunque estaba empadronado en Girona, su residencia habitual estaba en Francia.
La familia, de origen, había ido a su casa de Lloret de Mar a pasar la Semana Santa. Sergey Protosenya, su esposa Natalia y su hija adolescente de 18 años habían viajado hasta Girona y dejaron al otro hijo de la familia en su residencia en Francia. El hijo fue el que alertó desde el país galo porque su madre no contestaba al teléfono.
Los Mossos d’Esquadra se presentaron en el chalet de Lloret de Mar en la tarde del martes y solo pudieron certificar la muerte de tres personas. Los agentes se encontraron a la madre en una habitación, a la hija en otra, y ambas con heridas de arma blanca. En el jardín de la vivienda, encontraron ahorcado a Sergey Protosenyas, además de un hacha y un cuchillo con restos de sangre.
La vida de Sergey Protosenyas era de lujo gracias a su fortuna de más de 400 millones de euros. El hombre tenía un alto cargo en Novatek, una importante empresa que se dedica a la distribución de gas, siendo el vicepresidente del Consejo de Administración desde hace más de siete años.
La vivienda de Lloret de Mar era segunda residencia de la familia rusa porque vivían en Francia. Los Mossos d’Esquadra trabajan en la hipótesis de la violencia machista y que Sergey Protosenyas asesinó a su mujer y su hija a hachazos, y después se suicidó en el jardín.
El millonario ruso no tenía ninguna denuncia por violencia de genéro y era habitual ver a su familia compartir sus aficiones en redes sociales. Los vecinos de Lloret de Mar no vieron nada extraño en la familia rusa y señalan que eran muy educados. De puertas para fuera nada hacía indicar que fuera a pasar el trágico suceso.